Con aproximadamente 11,110 m2 de construcción, la torre contiene cuatro (4) niveles de estacionamiento subterráneo y quince (15) niveles para oficinas corporativas. Se repite el mismo plan típico, excepto en los 3 primeros niveles. En la Planta Baja, hacia el oeste se encuentra el área de Recepción con una impresionante doble altura y un muro cortina curvo; Al oriente se ubica una plataforma bancaria con un entrepiso en el segundo piso. En el tercer nivel se encuentra un Club de Conferencias y un área de Cafetería con terraza abierta con vista a la ciudad. La circulación horizontal y vertical se resuelve en la parte sur del edificio, permitiendo así que todas las oficinas tengan vista a la Av. Gustavo Mejía Ricart- al norte- y Av. Abraham Lincoln- al oeste- y predeterminando una fachada más cerrada. hacia esta zona. El principal atractivo de este edificio de oficinas reside en la compleja red de su fachada, que a modo de tejido o rompecabezas genera un patrón en zigzag de líneas diagonales con piezas prefabricadas de foamcrete. Este patrón constituye el producto final de un completo proceso experimental explorando composiciones y diversos ritmos; y hace alusión a la actual era digital, emulando la geometría de un chip de ordenador. Con este concepto, la circulación vertical (ascensores y núcleo de escaleras) de la fachada sur, se comporta como un chip dentro de una placa base, desde donde se ramifican todos los elementos a los diferentes circuitos de la fachada.